Ir al contenido principal

Proyecto Cary Grant Nro. 36: Once Upon a Time (Érase una vez) - Alexander Hall, 1944.-



Once Upon a Time comienza con una introducción escrita en la pantalla que nos anticipa que estamos por ver un cuento fantástico en el contexto dramático de 1944, y lo que nos presenta es precisamente eso: una historia de fantasía, ligera y sentimental con guerra y desesperanza de fondo. Jerry Flynn (Cary Grant) es un empresario teatral que viene de fracaso en fracaso y está a punto de perder su teatro a manos del banquero McKenzie (Howard Freeman) cuando encuentra en la calle a unos niños, Pinky (Ted Donaldson) y Fatso (Mickey McGuire), que cobran unos centavos por dejarte ver una oruga que baila al compás de una cancioncilla. La oruga (llamada Curly) es de propiedad de Pinky y Jerry, deseoso de aprovechar el negocio, la transforma en una estrella y en un símbolo de esperanza.-

El mensaje de la película es simple y por momentos es expuesto a los ladrillazos, pero la historia no carece de encanto y una vez que termina de precalentar, toma buen ritmo. Si bien la rutina de Jerry intentando convencer a los hombres de la prensa, encabezados por el incrédulo Brandt (William Demarest), de que tiene un buen espectáculo entre manos se torna por momentos un pelín repetitiva, lo cierto es que la película nunca descansa, está en perpetuo movimiento en la medida en la que las posibilidades comerciales de Jerry se acrecientan. El punto cúlmine del negocio tiene por protagonista al propio Walt Disney (Walter Fenner), quien está interesando en comprar a Curly para hacer una película con él, y el plazo de una semana que Jerry tiene para cancelar sus deudas y salvar su teatro, aporta un sentido de urgencia a la trama.-

Uno de los aspectos más interesantes de la película es comprobar, pese a la sencillez de la historia y su tono familiar, la gran destreza del director Hall. Este director ya había trabajado antes con Grant en Sinners in the Sun y apareció en este blog con su divertidísima This Thing Called Love (me falta todavía ver Here Comes Mr Jordan, que tiene muy buena pinta). Aquí captura de manera magistral el encanto que causa Curly en todos los que lo observan bailar, sin develar hasta un punto cúlmine el aspecto del propio bicho y a veces debe recurrir a movimientos de cámara muy inspirados para ello.-



Por otro lado, si nos concentramos en nuestro homenajeado en esta serie, resulta interesante ver la evolución de Jerry. El protagonista empieza la historia como un empresario arruinado y desilusionado, recluido en su templo de auto adulación - su teatro - y en esta primera parte el estilo de actuación de Grant es exagerado y teatral. Cuando encuentra a Pinky y a Curly, se convierte en un buscafortunas inescrupuloso, engatusando tanto al niño y a su hermana mayor Jeannie (Janet Blair) como a los periodistas que le darán espacio en los periódicos y la radio; aunque tras el llamado de atención de su compinche “El Burro” McGillicuddy (James Gleason) primero y del propio Pinky después, termina encontrando la ilusión que pretendió venderle al público. El Jerry de Cary Grant se mueve en la línea de su Walter Burns de His Girl Friday, es de esos personajes moralmente grises, aunque con un corazón de oro bien escondido, que Grant interpretaba tan bien.-

Como respaldo de esta interpretación, el resto del elenco de la película es brillante. Los niños de la película (y en una escena en particular, hay muchos) están fantásticos, en especial el joven Ted Donaldson que maneja un amplio rango de emociones sin sonar nunca afectado como a veces ocurre con los niños actores del Hollywood clásico. Y el elenco de adultos está lleno de caras conocidas (incluyendo una brevísima aparición de Lloyd Bridges), de esas cuyos nombres muchas veces no conocemos pero que redondean el alma de una película (destaco especialmente a Tom Dugan en el rol de un policía con voz de tenor y a Pedro de Cordoba y Vaughan Glaser como dos científicos cuyos rostros serán muy reconocibles para los amantes de Saboteur de Alfred Hitchcock).-

En definitiva, esta película no será seguramente la favorita de nadie, pero promete ser reconfortante y cumple.-


Comentarios

  1. Hola Bet
    Difícil no recordar al muy reciente Mr. Lucky, otro "empresario" en busca de un último golpe de suerte. Curioso nombre, Jerry Flynn, "primo lejano" de "errol Flynn" tal-vez.
    Deliciosa la broma-cameo-autoparodia de Walt Disney interesado en fichar a otro bichejo para su colección de animados (juraría recordar alguna negra oruga oscilante "curly" en un Disney-corto).
    Por si el titulo de "Érase una vez, Once Upon a Time" fuese poco popular, veo que también se nombro esta peli como "El eterno pretendiente" (pobre oruguita, tanto cimbrearse y no llegó a casarse con su príncipe azul).
    Un saludo, Manuel.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. "El eterno pretendiente" por "Érase una vez" tiene que llevarse el premio a la más ocurrente innovación de los distribuidores, o al menos quedar entre las cinco mejores, jaja. Cómo llegaron hasta ahí es algo que no me imagino, sobre todo porque si algo no hace la película (y yo celebro que así sea) es enfatizar el aspecto romántico que podría haber tenido la historia.-
      No sé si Jerry Flynn será pariente de Errol, pero da más de una voltereta acrobática en esta historia, con tal de cerrar el negocio con Pinky jeje.-
      Le mando un saludo, Bet.-

      Borrar
  2. ¿Te imaginas presentar ahora tal argumento? Un empresario arruinado cree que una oruga que baila puede salvar su negocio.
    Hay ideas descabelladas que dan como resultados películas olvidadas pero que tienen algo...
    Ahí va otra: un hombre se hace amigo de un conejo gigante que solo ve él.
    Y otra: una empresa busca un milagro estadístico y así ocurre con una pequeño pueblo, Grandview...
    ... curioso ciclo, ¿verdad?
    ¡¡¡Ya llevas 36 películas de Grant... y todas las que quedan!!! Qué gran proyecto
    Beso
    Hildy

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Uuuyy, yo justo ando de malas con el cine contemporáneo, tal vez sea eso lo que me lleva a aventurar que si se contara esta historia en la actualidad, los realizadores no resistirían la tentación de mostrar a Curly con una oruga animada y con expresiones humanas. O contarían la historia desde el punto de vista de Curly, con un punto de vista subjetivo y la cámara encerrada en la cajita que le sirve de hábitat. Algo así de horroroso, jaja.-
      Adoro la referencia a "Harvey", es una de mis películas-remedio y de veras que recupera esta idea de un símbolo de esperanza en medio de una sociedad en caos. Pero la sorpresa para mí es la referencia a "Magic Town", no conocía la existencia de esta película pero solo ver el elenco y el director me puso en su búsqueda.-
      ¡En realidad hay más películas de Grant en este espacio! En su momento decidí omitir de la cuenta a aquellas que ya había comentado (tal vez no fue la decisión más acertada porque se presta a confusión) pero esta es la película largometraje número ¡cuarenta y cinco! en su carrera. Es impresionante, sobre todo teniendo en cuenta que llevaba sólo doce años de trayectoria en Hollywood, desde su debut en 1932. Ya a partir de los siguientes años iría bajando el ritmo pero estos comienzos fueron moviditos.-
      Te mando un beso grande, Bet.-

      Borrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Skyscraper Souls - Edgar Selwyn, 1932.-

Me dieron ganas de reencontrarme con mi querido Warren William, y decir su nombre remite ineludiblemente al cine pre-code , período en el cual fue rey. En este caso William es David Dwight, un banquero que no se detendrá ante nada hasta lograr la total propiedad de un edificio de cien pisos, de ahí el título de la película, algo así como “almas de rascacielos”.- Esta es una película coral que cuenta, a lo largo de distintas oficinas que funcionan en el edificio Dwight, un puñado de historias de la Depresión económica. El hilo conductor es Lynn Harding (Maureen O’Sullivan), una joven recién llegada a Nueva York para trabajar como secretaria de Sarah (Verree Teasdale), la secretaria, amante y mano derecha de Dwight. A través de Lynn conocemos a Jenny (Anita Page), una mannequin que trabaja para el modisto Vinmont (Gregory Ratoff); y también a Tom (Norman Foster, quien a su vez dirigió Journey into Fear , de reciente aparición en este blog, qué pequeño es el mundo), un cajero de banco to...

It’s a wonderful life (Qué bello es vivir) - Frank Capra, 1946.-

Momento N° 1: evitando una tragedia.- George Bailey (James Stewart) se pasa media película evitando tragedias, pero en este caso me refiero a la secuencia en la cual siendo niño (encarnado por Robert J. Anderson) evita que el Sr. Gower (H. B. Warner), el farmacéutico para el cual trabaja, envenene por error a un niño enfermo. Se trata de una secuencia muy compleja en la que Capra presenta varias situaciones decisivas para el resto de la película: presenta a George como un niño curioso por los lugares más lejanos del mundo, altruista, que apela a la verdad para resolver los problemas que se le presentan y no teme enfrentarse al hombre poderoso del pueblo, el Sr. Potter (Lionel Barrymore), para defender la obra de su familia, es decir, vemos a George tal y como será de adulto; el director presenta también a la coqueta Violet (Jeanine Ann Rose/Gloria Grahame), a la fiel Mary (Jean Gale/Donna Reed) y al despistado tío Billy (Thomas Mitchell), hermano del Sr. Bailey (Samuel S. Hinds)...

Meet John Doe (Juan Nadie) - Frank Capra, 1941.-

Este año no pensaba hacer una sección de películas navideñas y me pasé los últimos días mirando deliberadamente pelis de otros géneros, pero a último momento me ganó la tentación y decidí reencontrarme con un título que en su momento ví y con el que no terminé de conectar del todo. Todo sea en pos de dar segundas oportunidades en Navidad, ¿verdad? Meet John Doe tiene una premisa bien sencilla: Ann Mitchell (Barbara Stanwyck) es una columnista que acaba de ser despedida de su periódico y para mostrar su poder sensacionalista, inventa una carta del lector en la que un tal Juan Nadie anuncia que se suicidará tirándose desde la torre del palacio municipal en Navidad, para protestar por el estado del mundo. Ann convence a su editor, el Sr. Connell (James Gleason) de que le devuelva el puesto (con un aumento y un bono extra) y de que consigan un vagabundo que se haga pasar por Juan Nadie para seguir vendiendo periódicos con la historia y entonces aparece el candidato perfecto: se trata de “...